09/06/2014

El Reglamento 1881/2006, de 19 de diciembre, por el que se fija el contenido máximo de determinados contaminantes en los productos alimenticios establece, entre otros, límites máximos de plomo, cadmio y mercurio en los productos pesqueros. En su artículo 2 se indica que al aplicar los contenidos máximos establecidos en este Reglamento, se deberán tener en cuenta los cambios de concentración de estos contaminantes, producidos por los procesos de secado, dilución o transformación. Es de destacar que este reglamento ha sido modificado en varias ocasiones, una de las más recientes se ha producido a través del Reglamento 488/2014 de la Comisión, de 12 de mayo de 2014, por lo que respecta al contenido máximo de cadmio en los productos alimenticios.

En los pasados años, diversos estudios realizados en España y otros países de la UE en los que se comparó el nivel de los metales pesados a lo largo del procesado, fueron constatando que en algunos casos, se producía una concentración de dichos metales, mientras que en otros no se producía ningún cambio o incluso había dilución.

Como resultado de esos estudios, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición, elaboró y publicó un listado con varios factores de transformación, que actualmente ha sido actualizado incorporando los nuevos LM de cadmio en determinados productos de la pesca (anchoa, melva, sardina). El objetivo de la publicación de dicha lista, es permitir una aplicación uniforme por parte de todos los organismos de inspección, en el control de metales pesados en productos de la pesca, así como ofrecer información al consumidor y los sectores productores.