La EFSA publica una guía de orientación sobre el marcado de la fecha en los alimentos envasados: fecha de caducidad o fecha de consumo preferente
Publica: Agencia Española Seguridad Alimentaria y Nutrición
Fecha: 09 diciembre 2020
Sección: Seguridad Alimentaria
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha desarrollado una herramienta para ayudar a los operadores económicos de empresas alimentarias a decidir cuándo aplicar la fecha de caducidad o de consumo preferente a sus productos.
El marcado de las fechas de consumo en los alimentos es un aspecto de gran relevancia y debe ser claro y comprensible dentro del etiquetado de los mismos. La fecha de caducidad de los alimentos es una cuestión de seguridad alimentaria pues los alimentos pueden consumirse hasta la fecha marcada y no después, aunque aparentemente conserven sus características organolépticas normales. Cuando aparece la mención «Consumir preferentemente antes de » está referida a cuestiones de calidad y no de seguridad alimentaria. El alimento será seguro para consumir después de esa fecha, pero puede haber perdido ciertas características en su calidad, como pueden ser el sabor o la textura.
Según los datos aportados por la Comisión Europea hasta el 10% de los 88 millones de toneladas de residuos alimentarios generados anualmente en la UE están vinculados a la indicación de la fecha en los productos alimenticios.
Disponer de una información clara y correcta en los alimentos envasados y una mejor comprensión y utilización de la indicación de la fecha de consumo en los alimentos por parte de todos los agentes de la cadena alimentaria, puede contribuir a reducir el desperdicio de alimentos en la UE, al tiempo que se sigue garantizando la seguridad alimentaria.
Por todas estas razones, la EFSA ha elaborado la primera parte de la guía Guidance on date marking and related food information: part 1 (date marking), en este caso, sobre marcado de fechas. Con un enfoque basado en el riesgo, esta guía pretende ayudar a los operadores económicos de empresas alimentarias a decidir el tipo de marcado de la fecha (es decir, la fecha de consumo preferente o la fecha de caducidad), el establecimiento de la vida útil y la información que debe figurar en la etiqueta para garantizar la seguridad alimentaria.
La decisión sobre el tipo de marcado de la fecha debe tomarse producto por producto, considerando los peligros relevantes, las características del producto y las condiciones de procesamiento y almacenamiento.
La identificación de peligros es específica de cada producto alimenticio y debe considerar los microorganismos patógenos capaces de crecer en alimentos pre-envasados con temperatura controlada en condiciones razonablemente previsibles. Los factores intrínsecos (por ejemplo, pH y aw), extrínsecos (por ejemplo, temperatura y atmósfera de gas) e implícitos (por ejemplo, interacciones con la microbiota de fondo en competencia) del alimento determinan qué microorganismos patógenos y alterantes pueden crecer en el alimento durante el almacenamiento hasta el consumo.
Esta herramienta está estructurada en forma de un árbol de decisión con una serie de preguntas a las que deben responder los operadores económicos de empresas alimentarias, para ayudarles a decidir si es necesaria una fecha de «caducidad» o de «consumo preferente». Las preguntas engloban desde si los requisitos de indicación de la fecha para una categoría de alimentos ya están regulados por la legislación, si un producto se somete a algún tratamiento para eliminar peligros osi se manipula de nuevo antes del envasado, hasta sus características y las condiciones de almacenamiento.
Los expertos también revisaron los factores que los operadores económicos de empresas alimentarias deben tener en cuenta para fijar una fecha de vida útil: el período de tiempo durante el cual un alimento seguirá siendo seguro o de una calidad adecuada para el consumo mientras el envase esté intacto y se almacene según las instrucciones especificadas.
Además proporciona recomendaciones relacionadas con actividades de formación y apoyo, utilizando "condiciones razonablemente previsibles", recopilando datos de tiempo y temperatura durante la distribución, venta minorista y almacenamiento doméstico de alimentos y establece los niveles de protección apropiados y objetivos de seguridad alimentaria para combinaciones de patógenos de alimentos.
En 2021, la EFSA publicará otra opinión sobre este mismo tema, que se centrará en la información que se brinde a los consumidores sobre las condiciones de almacenamiento y los plazos de consumo después de apertura de envases y la descongelación.
Más información sobre el etiquetado de alimentos en esta campaña de la AESAN: El etiquetado cuenta mucho.