La AESAN publica el informe de resultados del programa de “Intervención de promoción de hábitos saludables en el ámbito laboral” (IPHASAL)
Publica: Agencia Española Seguridad Alimentaria y Nutrición
Fecha: 24 noviembre 2020
Sección: Nutrición
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, a través del Observatorio de la Nutrición y de Estudio de la Obesidad, en el marco de la Estrategia NAOS, ha publicado hoy los resultados de la evaluación del programa de “Intervención de promoción de hábitos saludables en el ámbito laboral” (programa IPHASAL).
Desde su inicio, la Estrategia NAOS de la AESAN impulsa y participa en diversos ámbitos desarrollando intervenciones e iniciativas de promoción de la salud basadas en la alimentación saludable y la actividad física. En esta ocasión, la Estrategia NAOS de la AESAN y la Fundación Alimentum abordaron el diseño, implementación y evaluación de un programa de intervención de promoción de hábitos saludables en el ámbito laboral (IPHASAL), basado un modelo de buenas prácticas estandarizado, a partir de una intervención de salud comunitaria en la población española adulta para la promoción de hábitos cardiosaludables (Programa Fifty-Fifty).
El Programa Fifty-Fifty, en el que se basa la presente intervención, surgió de una iniciativa de la Fundación SHE (Foundation for Science, Health and Education), promovida por el Dr. Valentín Fuster. Se trataba de un programa de prevención de riesgo cardiovascular dirigido a población adulta, cuyos objetivos eran capacitar a la población adulta para la mejora de hábitos de salud integral (alimentación y actividad física) y el autocontrol de los factores de riesgo cardiovascular (sobrepeso, tensión arterial y tabaquismo) mediante la educación entre iguales.
Las enfermedades no transmisibles (ENT) son responsables de más de dos tercios de todas las muertes que se producen en el mundo, siendo las enfermedades cardiovasculares la principal causa de muerte por ENT en España. El exceso de peso, los hábitos alimentarios no saludables, el consumo de tabaco, la inactividad física y la tensión arterial elevada son algunos de sus principales factores de riesgo, pero a su vez son modificables mediante intervenciones de promoción de la salud cardiovascular, que incluyen práctica regular de actividad física, una alimentación saludable, no fumar, y mantener cifras normales de peso y tensión arterial. El ámbito laboral resulta además óptimo para el desarrollo de estas estrategias de promoción de la salud, incidiendo de forma favorable en la salud de los trabajadores, pero repercutiendo positivamente también en las familias, empresas, comunidades y sociedad en general.
El programa IPHASAL se desarrolló entre octubre de 2017 y febrero de 2019. Inicialmente se impartió a los trabajadores participantes una serie de talleres formativos, desarrollados por profesionales propios de la empresa o externos, durante el horario laboral, sobre las siguientes temáticas: motivación para el cambio, gestión del estrés, cesación tabáquica, alimentación saludable, actividad física y tensión arterial. Posteriormente, los trabajadores asistieron a sesiones grupales mensuales en las que los participantes explicaban sus experiencias, conocimientos sobre hábitos saludables, sus progresos y las dificultades encontradas. En la intervención de promoción de hábitos saludables en el ámbito laboral participaron 13 empresas y 325 empleados. Antes y después de la intervención se pasó a los participantes un cuestionario sobre hábitos de salud y los servicios médicos de cada empresa realizaron además mediciones antropométricas y de tensión arterial.
La evaluación de la intervención de promoción de hábitos saludables de los trabajadores, realizada por la AESAN, se cuantificó a través del cambio medio, desde la valoración basal hasta la evaluación al final, en un índice calculado a partir de la suma de la puntuación en las 5 variables principales en estudio: tensión arterial, ejercicio, peso, alimentación y tabaco (Índice Fuster BEWAT (IFB).
Los resultados de la evaluación del programa IPHASAL que se recogen en esta publicación muestran que la intervención mejoró los hábitos de los trabajadores relacionados con la salud cardiovascular. La puntuación en el Índice Fuster-Bewat (IFB) se incrementó de forma significativa un 17,4% tras la intervención, teniendo las mujeres mayor beneficio que los hombres, así como los más jóvenes (24-35 años).
La adherencia a este programa de intervención de salud laboral tuvo un papel relevante obteniendo mejorías significativas sólo los participantes con 6 o más sesiones. El sexo femenino fue, además, un factor predictor independiente de mejoría de los hábitos relacionados con la salud cardiovascular. La actividad física, así como la situación ponderal fueron los dos parámetros en los que se registró una mayor mejora de la puntuación.
El programa IPHASAL ha puesto de relieve su efectividad en el ámbito laboral, tratándose de una herramienta que facilita la construcción de ambientes de trabajo saludables, dotando de recursos personales de salud a los trabajadores y ayudándoles a potenciar el cambio hacia estilos de vida saludables. Los resultados evidencian que es factible desarrollar el programa IPHASAL en las empresas, siempre que se impulse por parte de sus responsables y con la participación de los servicios médicos de empresa.
Puede consultar el informe completo y demás intervenciones de la estrategia NAOS de la AESAN en esta sección de nuestra Web.